Aleteo quebrado.

Soy algo más que simple hueso y piel.
Más que un conjunto de sentimientos desbocados en un lío de mil palabras y absurdeces. Más que el náufrago sin esperanza de volver a la civilización, que el colonizador de nuevas tierras. Soy más que un lienzo blanco sobre el que pintar, que una página en la que puedes escribir a tu antojo. Más que una canción por terminar y una melodía incompleta. Soy más que un grano de arena en medio de la playa. Más que la semilla que trepa hacia la luz del sol.


Soy más que nada y menos que todo, pero hoy sencillamente no importa dónde alcanza el todo y dónde termina la nada.

Los límites nos los ponemos nosotros mismos.
Cada uno se impone sus barreras, y es asunto personal derribarlas.
Aunque a veces las lágrimas corran y en otras amanezca una sonrisa...